Brisa llegó a la vida de Angélica Blandón como un viento fresco y suave en cualquier amanecer. Como suele aparecer la primavera cargada de color, de resplandor y brillo, en un comienzo de estación. Como una maravillosa sorpresa que no estaba planeada, como no se planea ser madre cuando se tienen escasos 24 años.
Con un baúl lleno de sueños, un comienzo de carrera, un camino por andar y una vida por descubrir, Brisa Ospina Blandón fue una verdad contundente, clara y directa para la joven actriz Angélica Blandón que comenzaba a transitar, con paso firme, los esquivos caminos de la actuación. Mil cosas pasaron por su mente cuando supo que estaba embarazada. “Mi primer sentimiento fue que no era el momento. Acababa de rodar ‘Paraíso Travel’ y se me venían encima unas giras impresionantes, el inicio de mi carrera y yo estaba embarazada. La vida me cambió desde el momento que descubrí que iba a ser mamá”, expresó.
La experiencia de ser mamá ha sido la más maravillosa de todas las que ésta joven y talentosa actriz ha vivido hasta el momento. “Para mí, Brisa es mi realización como mujer. Como ser humano. Pasó un año desde que terminé de Rodar la película, hasta cuando comenzó la promoción y mi hija ya tenía tres meses de nacida. Todo fue perfecto porque afortunadamente yo no me engordé y fue como si nada hubiera pasado y lo asumí así, como si nada hubiera pasado”.
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